Las cabezas de cordero al horno, o cocinadas de cualquier otra forma, puede que no sean del agrado de todos, pero son sin duda un delicioso manjar. Hoy en Moralon, líderes en cordero asado a domicilio, queremos ofrecerte una receta muy popular que estamos seguros de que, si eres amante de la casquería, te va a resultar toda una delicia.
Las cabezas de cordero al horno es un plato muy extendido por todo el mundo. Este delicioso plato lo podemos encontrar en la gastronomía alemana, francesa, latinoamericana, en países de oriente medio y por supuesto en la española.
Como curiosidad, te contaremos que las cabezas de cordero es el desayuno favorito en Irán, especialmente lo desayunan los jóvenes los fines de semana. El “cale paché”, que así se llama, es un desayuno muy nutritivo y saludable.
Si eres amante del cordero y de los asados, no dejes de realizar esta deliciosa receta de cabezas de cordero al horno.
Receta de cabezas de cordero al horno
Ingredientes
- 3 cabezas de cordero lechal
- 1 cebolla
- Aceite de oliva
- Perejil y sal
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de pan rallado
- Vino blanco
- patatas
- Un vaso de agua
- Pimienta negra en grano
- 1 hoja de laurel
Lo ideal es que hagas una cabeza por comensal, porque no tienen mucha carne. Aunque todo dependerá del hambre que tenga cada uno, puede que alguien con media cabeza tenga suficiente.
Pide en la casquería que te las corte por la mitad y si no os gustan los ojos será mejor que te los retiren. No obstante, te recomendamos que los pruebes porque seguro que te sorprenderá su sabor.
Aunque el punto fuerte de sabor quizás resida en los sesitos. Por eso, en nuestra receta le vamos a dar un toque especial recubriéndolos con pan rallado, ajo, sal y un chorrito de aceite.
Elaboración de la receta
- Lo primero que tendrás que hacer es lavar las cabezas con agua, ten mucho cuidado de no desmenuzar la parte de los sesos que es muy frágil. Luego, métalas en un recipiente con agua muy fría durante toda la noche en la nevera. Con esto, lo que conseguirás es que pierdan toda la sangre que tengan y queden muy blanquitas.
- El siguiente paso será escurrirlas muy bien, déjalas sobre un paño el tiempo que sea necesario hasta que suelten toda el agua.
- Mientas tanto, prepara una cama de cebolla y patata en una fuente de horno.
- Una vez las cabezas hayan soltado toda el agua, añádeles sal por ambos lados y colócalas encima de la cama de cebolla con la parte de los sesos hacia arriba.
- Ponle las hojas de laurel y vierte el vaso de vino blanco junto con el agua.
- Ahora toca darle el toque a la zona de los sesitos. Espolvoréales por encima un poco de pan rallado y luego el ajo picado. Si te gusta, también puedes añadirle pimienta y perejil.
- Pon a calentar un poco el aceite en una sartén. Una vez caliente, viértelo por encima de los sesos de todas las cabezas. Con este paso conseguirás que cuando los ases, tengan una textura mucho más sabrosa.
- Mientras tanto, pre-calienta el horno y cuando esté listo mete la bandeja durante 1 hora a 220º, con calor arriba y abajo.
- Durante el proceso no hace falta que les des la vuelta, pero sí que vayas comprobando que no se queden secas, si fuera así añádeles otro vaso de vino blanco.
Valores nutricionales de las cabezas de cordero
Las cabezas de cordero al horno son una delicia culinaria que se disfruta en muchas partes del mundo. Pero, además de su sabor y textura únicos, también tienen importantes beneficios nutricionales.
Y esto es así porque son una excelente fuente de proteína, vitaminas y minerales esenciales para el cuerpo humano. Por ello, consumidas con la lógica moderación, te aportarán valores nutricionales muy positivos.
A continuación, te detallamos los principales nutrientes presentes en este delicioso plato:
Proteína: La carne de cordero es una de las mejores fuentes de proteína. Una cabeza de cordero puede contener hasta 80 gramos de proteína de alta calidad.
Hierro: Las cabezas de cordero al horno te aportarán hierro, un mineral esencial que ayuda a la formación de glóbulos rojos y al transporte de oxígeno en el cuerpo.
Calcio: Las cabezas de cordero son también una buena fuente de calcio, que es muy importante para la salud ósea.
Vitaminas B: Las cabezas de cordero al horno son ricas en vitaminas del complejo B, especialmente B12, que ayuda a mantener un sistema nervioso saludable.
Ácido linoleico conjugado: También son una gran fuente de ácido linoleico conjugado, un tipo de ácido graso que puede tener beneficios para la salud, como la reducción de la inflamación.
¡Las cabezas de cordero están riquísimas!
Estamos seguros de que su delicioso sabor no te dejará indiferente, ni a ti ni a tus comensales.
Pero, si eres de los que no le gusta la casquería, inclínate entonces más por una pierna o paletilla asada de cordero lechal.
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